Con temperaturas que rondaban los 45 grados centígrados, la noche del 20 de agosto tenía preparada una sorpresa para Mexicali, fue la tarde en la que Alfredo ¨Perro¨ Angulo, volvió para ser profeta en su tierra.
Casi cinco años sin pelear ante su gente y trece meses fuera del ensogado, parecían una eternidad, misma terminó la noche del 20 de agosto.
El majestuoso Casas Geo de la Ciudad Deportiva, se vistió de gala para albergar, por primera ocasión en sus 35 años de historia un función de box.
La noche de ayer, el famoso Nido de los Águilas cambió los batazos por puñetazos y los bates por guantes, el característico olor de césped recién cortado, cambió al particular hedor de un gimnasio de box.
El playball fue sustituido por el campanazo de cada round y el diamante perdió su forma para convertirse en un cuadrilátero.
La noche del 20 de agosto, Alfredo Angulo acabó con su rival más rápido de lo que él mismo hubiera imaginado, pero esa noche no dejó de ser de fiesta, pues el hijo prodigo de Mexicali había vuelto.
El ¨Perro¨ de la colonia Hidalgo, volvió para hacer historia en el escenario que tantas glorias le ha traído al deporte cachanilla.
Creado en el año de 1976, el Nido nunca en su rica historia había albergado una función de box, el sábado lo hizo por primera vez con una pelea y una función que no han sido la mejor.
Pero algo si quedó claro, la pelea en la que Alfredo "Perro" Angulo tuvo una sesión de guantes (si se le puede llamar así), no nada más marcó el regreso de uno de los que es considerado entre los mejores Welter de la actualidad, sino para ser el parte aguas de los nuevos bríos que se avecinan a la prometedora carrera de el "Perro" Angulo.
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